Mira, te voy a contar algo que los de Euskadi están por hacer… y no, no es otra receta para un pintxo. Se han puesto serios y van a meter 800 millonacos para electrificar la industria. Sí, como lo oyes, ¡800 millones! ¿Te imaginas la cantidad de cosas que se pueden hacer con todo ese dinero? Pues están convencidos de que esto les va a poner a la cabeza en tecnología y sostenibilidad.
No es solo por amor a la Tierra, claro, allí están pensando en el dinerillo también. Se trata de modernizar la industria para que sea más eficiente y menos contaminante (porque, vamos, todos sabemos que el planeta ya no aguanta más). Y para colmo, esto puede traer un montón de empleos en sectores que son buenos para el futuro: tecnología y energías renovables… ¡El sueño de cualquier ingeniero verde!
Ahora, si te estás preguntando qué pasa con el resto de la peña -como tú y como yo- que vivimos a pie de calle… Bueno, al principio puede que veamos algún que otro precio subiendo, por el tema de esa inversión gorda en tecnología. Pero la idea es que luego todo salga más barato gracias a la eficiencia energética. Es como cuando compras una cosa buena por un pellizco, pero que luego dura un montón.
Para no quedarse atrás, las empresas tienen que espabilar y subirse al carro de la tecnología. El personal de siempre -tú, tus colegas, yo- va a tener que aprender a moverse en este nuevo escenario digital. Vamos, que si ya manejas el WhatsApp, ahora te toca ser un crack en cosas más avanzadas… porque el futuro espera por nadie.
Y ojo, que no es solo para los que ahora están en el mercado laboral… nuestros hijos también tienen que prepararse para que el cambio no los aplaste. Las escuelas y el gobierno se tienen que cargar las pilas (¡jaja, nunca mejor dicho!) para enseñar cosas útiles sobre tecnología y sostenibilidad.
En resumen, Euskadi va con todo para un futuro electrificado. Esto es una gran oportunidad para todos de subirse a un tren que puede llevarnos a un mundo más verde y con más pasta en el bolsillo si lo hacemos bien. Así que, presta atención a estos movimientos… ¿quién sabe? Quizá en breve estés hablando de ello con una caña en la mano, contándole a alguien lo listo que fuiste al estar preparado. 😉
